Look a la francesa
Los tonos verdes y púrpuras conviven en la propuesta de Yves Saint Laurent para esta temporada
En 1978 el modisto francés Yves Saint Laurent creó su línea de maquillaje, pues quería darle rostro a las mujeres que vestía; desde entonces, la casa francesa desarrolla propuestas inspiradas en la moda, con paletas deslumbrantes y coloridas que invitan a dejar volar la imaginación y a proclamar la belleza.
Fiel a esta consigna, el canadiense Lloyd Simmonds, director artístico de maquillaje de la maison desde junio de 2010, propone para esta temporada una colección que evoca un jardín de medianoche, donde la mirada y los labios cobran protagonismo con intensos tonos verdes y morados, respectivamente.
“Soñé con un jardín ardiente de vida, que vibraba de mil y un colores, con insectos de escamas color turquesa que irradiaban de luz, aves de llamativo plumaje, agua resplandesciente con tonos que iban del verde tornasolado al delicado púrpura”, ha declarado Simmonds cuando habla de la inspiración para crear esta antología.
¿Cómo conseguirlo?
El maquillista mexicano Juan Carlos Frank revela cómo conseguir este look, usando los tonos que sugiere Yves Saint Laurent, que son un auténtico derroche de color.
Se trata de una sugestiva propuesta donde una tez inmaculada, que apenas se ruboriza con un suave tono melocotón, contrasta con el claroscuro de una mirada hipnótica, imaginado que los párpados son unos pétalos nocturnos que irradian colores oscuros con reflejos.
Se requiere, en primer lugar, un color verde cobalto, que se completará con hermosos reflejos azul medianoche, púrpura y violeta.
Es recomendable que el pigmento principal tenga con efecto mate, y que los complementarios sean de acabado brillante, para un look más glamouroso y sofisticado.
El color verde también se usará como delineador, pero combinado con gris oscuro o negro, para aportarle mayor profundidad y sensualidad a la mirada.
Para esta propuesta es imprescindible que los ojos luzcan felinos, lo cual se consigue maquillando los ojos más allá de sus bordes naturales, haciendo una larga coleta que casi llegue a las sienes.
Enseguida, se aplica en el pliegue, el color azul; después, se completa el efecto con los pigmentos morados y púrpuras cerca del lagrimal. Se difumina bien.
Finalmente, se aplica abundante máscara de pestañas teniendo cuidado de no manchar los párpados; si se prefiere, se usan pestañas postizas para darle mayor dramatismo a la imagen.
Una vez que se concluyó el maquillaje de los ojos, toca el turno a los labios, donde se aplica un intenso tono uva delicadamente muarés (tela de seda con reflejos ondulados).
Para aportarle mayor intensidad a la boca, primero se delinea con un tono uva; después, se aplica la barra de labios, ya sea directamente o con ayuda de un pincel; posteriormente, se agregan destellos que se tomarán de una paleta de sombras; finalmente, se remata con un toque de gloss.
de: abcmaquillaje.com.ar
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