Uno de los maquilladores más influyentes actualmente
Max Factor, en la actualidad el nombre
más famoso del mundo de la cosmética occidental, nació en Lodz
(Polonia), en 1877, y comenzó su carrera como aprendiz con un fabricante
de pelucas. A los 20 años, ya dirigía su propia tienda de maquillaje.
Max Factor viajó a Estados Unidos en
1902 y, posteriormente, llevó a su familia allí para la Exposición
Universal de San Luis. Nunca regresaron a su país.
Empezó a vender productos para el pelo, importó cosméticos y realizó maquillajes teatrales para actores locales en San Luis.
A medida que se extendió su fama, los
actores de la naciente industria del cine acudían a Max Factor para que
les asesorase con el maquillaje. De este modo, la industria del cine,
que estaba empezando en Hollywood, le reclamó. Max Factor se estableció
en Los Ángeles con su familia en 1909 y consiguió un trabajo en el
Pantages Theatre.
En 1914, ya estaba perfeccionando el
maquillaje para las películas. Max había ideado una nueva alternativa al
maquillaje de color, que pensaba daba un aspecto terrible y “aterrador”
en la pantalla. También creó un maquillaje flexible, que constituyó el
primer maquillaje pensado para una película. Este maquillaje ayudaba a
que las actrices parecieran más naturales en los primeros planos.
Con la creación de pestañas postizas, el
lápiz de cejas, el brillo de labios y la base de maquillaje conocida
como “pancake”, Max Factor creó todo un nuevo lenguaje de los cosméticos
para la pantalla.
Inevitablemente, una vez que a las
actrices se les había hecho parecer tan elegantes en la pantalla,
querían mantener el mismo aspecto en la vida diaria, de forma que
llevaban el nuevo “maquillaje” de Max Factor en sus apariciones
personales.
No pasó mucho tiempo antes de que las
mujeres sin conexión alguna con el mundo del teatro o la industria del
cine pidiesen asimismo este maquillaje, de forma que también ellas
tuvieran una apariencia llena de glamur.
Fue en el año 1927 cuando Max Factor
introdujo sus primeros cosméticos para que se vendieran a los
consumidores fuera del mundo del teatro y el cine.
Antes de Max Factor, pocas mujeres
utilizaban cosméticos y fue él quien popularizó tanto la palabra
“maquillaje” como el uso (y el abuso) del repertorio cosmético.
Reconocido como el padre del maquillaje
moderno, Max Factor es responsable de haber inventado muchos de los
productos cosméticos clave (tanto para la pantalla como fuera de ella)
y, hoy en día, sigue siendo la fuente de inspiración de las tendencias e
innovaciones en lo que a belleza se refiere.
Max Factor murió el 30 de agosto de 1938.
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