Fuente de belleza

Desde que Vichy llegó al mercado no dejó de satisfacer y sorprender a las mujeres con sus cremas. A continuación, la historia de la marca que, después de 80 años, continúa brindandole a las pieles salud y belleza.
Calidad, nutrición y protección. A la hora de elegir cremas para la cara no hay nada mejor que ir a lo seguro. Vichy cumplió 80 años cubriendo las espectativas de mujeres que tenían una necesidad específica: ocuparse de la belleza de su cutis.
Dos hombres tomaron esto como un desafio, y en 1931 crearon la marca francesa. Ellos eran Georges Guèrin, un modesto industrial que dirigía Fragancias Grenoville y el Doctor Haller, dermatólogo encargado del establecimiento termal en la ciudad de Vichy. Juntos dieron vida a la Sociedad Dermatológica de Higiene de Vichy (VDHS). El resto es historia.
En aquellos años, las amantes del cuidado de la piel se encontraron con un universo mucho más amplio y novedoso. Ahora también se trataba de productos de higiene con virtudes terapeuticas otorgadas por el agua termal que procuraban darle a la piel salud y belleza.
Con este concepto como bandera Vichy colocó la piedra fundamental de la cosmetología moderna. Ahora todas las pieles (secas, muy secas y grasas) gozaban de la hidratación, nutrición sintiendose más suaves y protegidas que nunca.
Innovadora y visionaria. Vichy fue la primera firma de pre-guerra en publicar “Guías de Consejos de Belleza” que eran ofrecidas por los farmacéuticos a sus clientas. No era cuestion de magia sino de secretos médico-científicos muy bien aplicados. En 1955 L’Oreal adquiere La Sociedad Dermatológica de Higiene de Vichy (VDHS) y nace la Dermocosmética y las dermo consejeras ya que , para ese entonces, las consumidoras habían comenzado a aprender y enseñar cómo conservar la salud de su piel.
80 años después, llegó el momento de un cambio de rumbo. En un mundo donde el cuidado es una preocupación real, Vichy cambió su enfoque. Su verdadera vocación es la de mantener la sanidad de la piel y corregir los desórdenes fisiológicos. Por eso, más allá de la belleza “la salud pasa también por la piel”.