Alto voltaje

La electricidad revoluciona los tratamientos estéticos faciales: combinada con la toxina botulínica y otros procedimientos, logra efectos inmediatos. Así, la electroestimulación se convierte en un excelente recurso para modificar la actividad celular de la piel y mejorar su aspecto. Madonna, Kate Winslet, Uma Thurman y Milla Jovovich hacen uso de esta alianza perfecta entre neurotoxinas y electroestimulación.

 

La novedad de la electroestimulación reside en que va más allá de la superficie: penetra la barrera de la piel para movilizar los músculos y lograr así unaapariencia más natural.

 

 

“La electroestimulación mantiene los músculosregordetes y activos,además de prevenir ocorregir la pérdida de las convexidades.”NICHOLAS PERRICONE, dermatólogo de lascelebrities de Hollywood.

 

La electricidad es un fenómeno físico que se manifiesta por la atracción o repulsión entre las partes de la materia. Puede representarse en distintos planos, pero lo más sorprendente es que la electricidad es también útil para detener el paso del tiempo. Radiofrecuencia, ondas rusas y galvánicas, luz pulsada y led, entre otros, son tratamientos ya conocidos en el mundo de la estética. Se sabe que estimulan el colágeno, ayudan a tensar la piel y eliminan manchas o arrugas simplemente mediante el uso de electricidad en forma de luz, calor y microcorrientes. Sin embargo, la novedad de la electroestimulación reside en que va más allá de la superficie: penetra la barrera de la piel para movilizar los músculos y lograr así una apariencia más natural. Además, su aliada infaltable es la toxina botulínica, logrando resultados tan efectivos como inmediatos.
La toxina botulínica evita que el músculo se contraiga generando arrugas e imperfecciones. Es el lifting sin cirugía más eficaz, ya que los cambios se notan inmediatamente. Sin embargo, también tiene puntos en contra: debe renovarse cada cuatro a seis meses y puede llegar a paralizar los músculos de la cara equivocados. De hecho, aunque las toxinas no actúan directamente sobre los músculos, afectan los neurotransmisores, evitando gesticulaciones exageradas que producen arrugas. El riesgo radica en que si un músculo se inmoviliza, aunque sólo sea temporalmente, “como utiliza menos energía, puede tender a la atrofia”, asegura el fisiólogo de la piel Peter Pugliese, MD, en su libro Physiology of the Skin.
Cuando se descubrió la toxina estaba muy lejos de ser la materia prima esencial de un tratamiento antienvejecimiento: a principios de la década del ‘80, los médicos la usaban para calmar el parpadeo incontrolable y relajar los músculos de los ojos. La revolución cosmética de la neurotoxina comenzó en 1987 cuando dos médicos oriundos de Vancouver descubrieron el efecto suavizante que su aplicación provocaba en el entrecejo. Cuando se ocasiona alguna atrofia –aunque temporal– en los músculos, se hace imprescindible combinar la aplicación de rellenos con tratamientos faciales eléctricos, ya que estos estimulan los músculos logrando que puedan recuperar inmediatamente su tono. Según Guillermo Blugerman, presidente de la Asociación Argentina de Medicina y Cirugía Cosmética y director de Centros Médicos B&S, la cuestión no es tan alarmante: “La toxina se pone en determinados puntos clave de los músculos para evitar las arrugas; en caso de que se corra de lugar, afectando otras musculaturas, la mejor solución es esperar un mes y medio o dos, para que se pase el efecto”.
Pero además de estimular la correcta función de los músculos, los tratamientos faciales eléctricos o electroestimulación ayudan a reconstruir las convexidades. Tal como declara el dermatólogo más aclamado por las celebrities de Hollywood, Nicholas Perricone: “Las convexidades son las que hacen la juventud. Si nos fijamos en los pómulos, la frente, las sienes, y la mandíbula de una persona joven, veremos que estas emergen en forma de arco sobre el plano de la cara. Salen de las órbitas. Alrededor de los cuarenta años de edad, hasta promediando los cincuenta, las convexidades tienden a aplanarse. De los sesenta para arriba, pueden hasta volverse formas cóncavas. La electroestimulación mantiene los músculos regordetes y activos, además de prevenir o corregir la pérdida de las convexidades”. A nivel muscular, las microcorrientes actúan como un personal trainer para tonificar y tensar las fibras musculares. A nivel dérmico, aumentan no sólo la producción de colágeno y elastina, las proteínas estructurales principales que se degradan con la edad, sino también la de glicosaminoglicanos, que es el material viscoso en el que las proteínas se incrustan. Por su parte, la Dra. Velia Lemel, médica dermatóloga, miembro de la Sociedad Argentina de Dermatología y directora de Dra. Velia Lemel, Piel & Láser explica que “el uso de radiofrecuencia de alta energía produce un efecto de remodelamiento y tensión del colágeno en la dermis profunda, mejorando así la piel laxa o envejecida, lo cual demuestra ser un excelente complemento o alternativa no ablativa para distintas aplicaciones estéticas”, explica. Esta alianza perfecta entre neurotoxinas y electroestimulación ya iluminó los rostros de Madonna, Kate Winslet, Uma Thurman y Milla Jovovich. Y aunque cada médico sigue su propio protocolo, en nuestro país podemos encontrar distintos tipos de tratamientos que utilizan estas combinaciones.

TOXINA BOTULINICA + ACCENT LIFT. El Accent Lift es un procedimiento indoloro, no invasivo y progresivo que combina radiofrecuencia para promover la formación de colágeno, activar la circulación, acelerar el drenaje y tensar la piel. Junto a la toxina logra un efecto lifting sin cirugía. Primero se aplica la toxina y luego se indican las sesiones de radiofrecuencia. Cada zona tratada con la toxina tiene un costo de US$ 150 y su efecto dura 6 meses aproximadamente. Accent Lift se aplica de 4 a 6 sesiones y su precio es desde US$ 230, en Centros Médicos B&S, y desde US$ 450 –los pacientes miembros de Be Lasermed tienen hasta un 20% off adicional–, en Lasermed.

TOXINA BOTULINICA + THERMAGE. A la acción de la toxina se suma Thermage, que actúa sobre las capas más profundas de la piel para otorgar firmeza al colágeno existente y estimular su natural renovación. En una sola sesión de 1 hora, su efecto dura dos años. El tratamiento completo Thermage CPT 600 + toxina botulínica –½ ampolla– desde US$ 2.400 en Estética Seleme, y desde U$S 2.600 en Dra. Velia Lemel, Piel & Láser.
TOXINA BOTULINICA + FREEZE. Freeze es radiofrecuencia multipolar con pulsos magnéticos. Este innovador tratamiento estimula factores de crecimiento vascular, lo que provoca una mejor circulación y flujo de la sangre sobre el área de tratamiento y, por tanto, un beneficio antiage. Además, reestructura el colágeno y la elastina. La aplicación de toxina botulínica + Freeze tiene un costo desde US$ 350 la sesión, en Medicina para el Cuidado Estético - Dra. Silvana Dato.
TOXINA BOTULINICA + ORTHOMOLECULAR. Mientras la toxina “plancha” las líneas de expresión, el tratamiento de Mesoterapia Orthomolecular mantiene el equilibrio de las moléculas que componen el organismo.Previene el estrés oxidativo, responsable del proceso de envejecimiento de todas las células del organismo. Se aplican activos antioxidantes como la vitamina C y el ácido hialurónico en cara, cuello, brazos y escote mediante mesoterapia.Dependiendo de la zona a tratar, la toxina cuesta $ 3.700, las 100 unidades. Mientras que la Terapia Orthomolecular tiene un costo de $ 280 por sesión, en Lidherma.
LIFSKIN + INDIBA + ELECTROESTIMULACION. El sistema Lifskin cuenta con varios pasos donde se realiza limpieza ultrasónica, drenaje linfático e hiperestimulación, aumentando la circulación sanguínea. Esto ataca las ojeras y, a su vez, estimula la oxigenación de la piel, elimina las arrugas y líneas de expresión, tanto del contorno de los ojos como las nasogeneanas y las patas de gallo. La radiofrecuencia Indiba aumenta el tejido colágeno de sostén, la elasticidad y la firmeza de la piel. La electroestimulación facial trabaja la flaccidez muscular y se combina con el IPL TRIOS para trabajar las manchas y emparejar el tono de la piel. Las 5 sesiones de Lifskin + 10 sesiones de Indiba + 10 de electroestimulación tienen un costo de $ 4.290, en Bace Spa y Estética.
TOXINA BOTULINICA + LASER DE CO2 FRACCIONADO.El microhaz de luz penetra profundo en la piel mejorando significativamente la tensión de la misma, quitando cicatrices, marcas, arrugas de expresión y manchas; además, cierra poros dilatados. El tejido es vaporizado (no quemado) con una precisión absolutay esta acción pone en marcha fibroblastos que se defienden produciendo colágeno (cicatrización natural del organismo) y en consecuencia se reemplaza la piel dañada con piel fresca, radiante y sana. Luego de la sesión de láser, se aplican microinyecciones de toxina para borrar las arrugas profundas de expresión. Los efectos comienzan a verse a las 48/72 hs. Y los máximos resultados se ven a los 15 días. El costo es de $ 5.500 por sesión, en BioZone.
TOXINA BOTULINICA + FRAXEL. Es un tratamiento de láser fraccionado indicado para pieles envejecidas y dañadas por el sol, manchas profundas y arrugas finas, como también cicatrices de acné. El colágeno se reestructura y la piel se tensa mejorando su textura, color y elasticidad desde la primera sesión. Es una aplicación no invasiva, que no deja lesión y totalmente indolora. El paciente puede retomar sus actividades de forma inmediata. Para recuperar la frescura y luminosidad de la piel, se combina con toxina botulínica. Lo ideal es empezar a aplicarlo a partir de los 30 años, ya que además de atenuar las arrugas, las previene. Se aplica principalmente en el entrecejo, la frente y las patas de gallo, pero también puede aplicarse para redefinir los contornos del rostro, levantar la punta de la nariz y para modelar las cejas. El efecto puede durar entre 4 y 6 meses. El costo es desde US$ 1.500 en Dra. Velia Lemel, Piel & Láser.


Textos y producción: Mariela Raffaelli. Fotos: Claudia Martínez.
Maquilló: Patricia Celli para Sebastián Correa con productos Lancôme. 

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