Los chakras son centros de energía situados en el cuerpo y se activan con determinadas esencias. Los principales son siete. El cedro y el clavo de especia actúan sobre el primer chakra, generan tranquilidad y seguridad. El aceite de ylang ylang trabaja sobre el segundo, alivia la sensación de ira y ansiedad. La lavanda tiene un efecto sedante sobre el tercero. La esencia de rosas ofrece un fuerte efecto armonizador, así como la salvia que envía vibraciones curativas al centro del cuello. La menta ayuda a disolver bloqueos en el tercer ojo y contribuye a deshacer estructuras mentales restrictivas. El jazmín nos abre a otras visiones, se suma al incienso de efecto sublimador que sirve para purificar la atmósfera, al igual que la flor de loto.
Más información. Karina Parada, directora de AyurVida, www.ayur-vida.com.
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