El secreto de tus ojos

¡Llegó el sol! Y los anteojos para cubrirnos de sus efectos nocivos en nuestros ojos se renuevan. Lo que viene, cómo elegirlos y cómo cuidarlos.

Para tener en cuenta
- Los mejores materiales son el acetato y el metal (acero inoxidable). Buscá los que tengan las terminales hipoalergénicas y las bisagras con sistema Flex (que permite que la gafa se adapte a cualquier tipo de rostro).
- Fijate que vengan con stop-hinge, que evita que el terminal del anteojo golpee el cristal.
- Procurá siempre comprarte anteojos de buena calidad, ya que garantizan que el cristal sea el preciso para protegerte de los rayos del sol y los reflejos.
- Guardalos en un estuche para protegerlos de los posibles golpes.
- Limpialos humedeciendo la superficie de la lente (al menos con tu aliento) y utilizando un paño 100% de algodón o un papel tissue. Nunca los frotes con telas con componentes de acrílico.

Lo que viene
- La tendencia indica que se seguirán usando las gafas grandes y también las que son tipo clipper (¡como las de Tom Cruise en Top Gun!), con vidrios que no llegan hasta el borde de la patilla.
- El dorado, el animal print, el negro y el blanco serán los más trendys.
- Este año también resurgen los anteojos metálicos. Apostá al peltre, dorado y plateado, mates, rojos y violetas brillantes.

Secretitos por Mariana Arias
- Si tenés la cara redonda, usá anteojos con líneas rectas.
- Si tu cara es delgada y alargada, preferí los que tienen curvas.
- Si tu cara es corta, optá por los anteojos chicos. Siempre tomate el tiempo de probarlos antes.
- No uses anteojos de sol si no hay sol o en lugares cerrados. Es mejor maquillarse en esos casos. Pero si lo vas a usar como complemento, preferí los de líneas simples con poco accesorio en la patilla, colores neutros para acompañar un vestido, un traje, un jean y camisa o un traje de baño.
- Otra opción es usar un anteojo animal print, pero con un look neutro.

Lentes de calidad
Todas las lentes son curvas y las imágenes que vemos reflejadas, también. Pero estos reflejos no deberían deformarse. Si te pasa eso, estás ante una lente aberrada, que deforma la luz y que te puede causar mareos y cefaleas. ¡Descartalas!
A los efectos de la protección contra los rayos UV, no existe diferencia alguna entre los cristales más claros, los oscuros y los espejados. Si la lente es de calidad, todos filtran los rayos de igual manera. En situaciones de mayor luminosidad, preferí las lentes oscuras. Las espejadas son útiles para la nieve o el agua.