Se acerca el verano y la protección solar se hace indispensable. ¿El motivo? "Los rayos UV (tanto el sol como los de camas solares) generan manchas, envejecimiento y hasta cáncer de piel", así lo explica el dermatólogo Alberto Velasco, coordinador de la campaña contra el cáncer de piel que organizó la Sociedad Argentina de Dermatología.
Las personas caucásicas (piel blanca y ojos claros) son quienes deben tener mayor cuidado. "Al exponerse al sol a estas personas la piel se le enrojece y eso genera una quemadura, que es lo que comúnmente se traduce en bronceado. Por eso, los dermatólogos solemos decir que el bronceado seguro no existe sino que es una reacción de la piel ante la exposición solar", asegura Velasco.
Según la Sociedad Argentina de Dermatología, el cáncer de piel es la forma más común de cáncer en el ser humano. aunque detectado a tiempo es curable en la mayoría de los casos. La exposición a radiaciones ultravioletas (sol y camas solares) es la causa más importante y la más fácil de evitar. A esto se le suma que los daños solares son acumulativos y con el tiempo se traducen en manchas, arrugas y lunares.
Controlar los lunares
Tanto en consultorio como para autoexamen, los médicos suelen acudir al método ABCDE. "La A es buscar si el lunar es asimétrico. La B es ver si los bordes son irregulares. La C es ver la distribución de los colores (si es o no irregular). La D es evaluar el diámetro (si es de 0.6 centímetros hay que prestarle mayor atención). La E la evolución, cuando uno ve una lesión que con el tiempo pica, crece o sangra es dudosa", asesora el dermatólogo, quien asegura que este método es muy eficaz para que la gente pueda evaluar los lunares en su hogar y hacer una consulta al dermatólogo ante cualquier duda.
¿Qué pasa con las manchas?
Hay de distintos tipos y suelen potenciarse con la exposición solar. "Existen melasmas que se pueden dar por trastornos hormonales, hiperpigmentación o por tomar anticonceptivos. Todas estas se incrementan ante la exposición a los rayos UV. También existen las manchas del fotoenvejecimiento (que suelen tener las personas mayores en la mano o en la cara). Estas se producen por daños acumulativos del sol. Hay otro tipo de manchas que son las más comunes como las pecas", agrega el dermatólogo.
Disfrutar del sol
Según los dermatólogos lo primero que hay que tener en cuenta es el horario de protección solar. Tiene que ver con los horarios donde hay mayor radiación UV es de 10 a 16 hs. es donde hay que tener mayor cuidado. La mejor manera de darse cuenta es cuando la sombra es más corta que la estatura de la persona (el sol esta más perpendicular y puede hacer mayor daño).
Además de esto, hay que acompañarlo por el uso del fotoprotector se debe colocar media hora antes de salir. Debe ser renovado regularmente cada dos horas. Para los que hacen ejercicios al aire libre lo deberán hacer cada una hora. Otro punto importante es que la gente tome conciencia de que los protectores solares no resisten a la toalla. Por eso, al secarse hay que renovar la aplicación.
Para las pieles más claras se recomienda usar SPF 30 o más. Para las más trigueñas SPF 15 o más. Y para quienes estén en la calle, suele ser de mucha utilidad acudir a cremas hidratantes que tengan incorporado SPF 15 en su composición.
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