Las uñas: detalle obligado El tono del esmalte que usamos se ha convertido en la demostración de cuánto sabemos de moda o de qué tan trendy somos. Imprescindible, desde hace unos años es un accesorio más de nuestro look. Colores, estilos y lo que se viene para la próxima temporada.

Por segunda temporada consecutiva, pintarse las uñas se impone como una de las tendencias más top y sofisticadas. Por suerte, también es una de las más baratas.
El esmalte se volvió el complemento más versátil con el que una mujer puede contar, algo que antes sólo sucedía con carteras y zapatos. En tiempos de crisis, el negocio de la estética ofrece opciones relativamente económicas para estar a la moda, y ese no es un detalle menor.
Pero el furor del esmalte no está sólo relacionado con la situación económica. Las manos fueron, por varias décadas, un espacio desatendido por las tendencias que -contrariamente- sí marcaban las pautas en cuanto a peinados, largos de pelo, maquillaje y vestimenta. Hasta ahora minimizadas como espacio de expresión, las uñas se convirtieron en lienzo para la nueva demostración de estilo.



En el mundo
El furor en Estados Unidos de la manicura a la Louboutin, en la que el lado de adentro de la uña es pintada de colorado (como las suelas del famoso diseñador de zapatos francés) y el frenesí causado por la marca Minx -en la que el esmalte es reemplazado por unas calcomanías-, se suman al éxito que están teniendo los colores metalizados y el oro en las manos de las mujeres mas influyentes de la moda en el mundo.
El verde agua Chanel que tiñó las uñas de todas las modelos que Karl Lagerfeld hizo desfilar por la pasarela de su último desfile Primavera/Verano se agotó antes de salir a la venta.



Próxima temporada: todo es posible
Pero si la moda volviera a tornarse minimalista… ¿Las uñas volverían a perder el protagonismo ganado? De ninguna manera. Estamos siendo testigos del nacimiento de una nueva plataforma de tendencia: marcas como las americanas OPI y Essie o la brasileña Impala están introduciendo tonos con acabado mate, con glitter, con efecto tornasolado y una variedad de colores que permite a las más osadas cumplir todos sus sueños de expresión. Las menos osadas, en tanto, también tienen razones para festejar ya que muchas de las marcas históricas están reeditando tonalidades vintage. Los rojos, los naranjas y todas sus derivaciones serán, sin duda, los colores obligados para las manos más cautas. Las mismas que en invierno se animaron al negro o azul noche.



Asesoró: Pablo Maggi, jefe de ventas, Esmaltes Impala.